Salzburgo es una ciudad preciosa de por sí, aunque en el tiempo que nosotros estuvimos la lluvia le quitó un poco de encanto por un lado, aunque le añadió otra clase de encanto por otro, ya que la capa de niebla que cubría la ciudad aquel día la hacía también muy bonita. Pues esta foto pertenece a una parte del monumento que adorna una de las múltiples plazas que hay en Salzburgo.
lunes, 4 de febrero de 2008
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario